En el futuro podría tener que recurrirse a la fecundación in vitro para lograr el embarazo | FOTO: Revista El Universo |
Dicha investigación fue liderada por Shanna Swan, profesora de salud ambiental y pública, quien advirtió sobre las grandes cifras de infertilidad que se han registrado en las últimas décadas, tanto en el sexo femenino como en el masculino.
El estudio señala que los recuentos de espermatozoides "disminuyeron significativamente entre los hombres de América del Norte, Europa y Australia durante 1973-2011, con una disminución del 50-60% entre los hombres no seleccionados por fertilidad, sin evidencia de estabilizarse en los últimos años. Estos hallazgos sugieren fuertemente una disminución significativa en la salud reproductiva masculina, lo que tiene serias implicaciones más allá de las preocupaciones sobre la fertilidad".
Debido a este problema, Swan lanzó un libro, titulado Count Down (cuenta regresiva), en el que explica los motivos por los que los seres humanos están presentando cada vez más complicaciones en la procreación.
Great to sit down with you @AlchemyAmericanFull video on YouTube is worth the watch ⬇️#Pthalates #SpermDecline #CountDowntheBook https://t.co/8hQgjhOF5k— Shanna Swan, PhD (@DrShannaSwan) December 2, 2021
En él señala que, además del retraso en la maternidad y el estilo de vida que se lleva hoy en día, hay una estrecha relación entre el consumo de productos químicos y la infertilidad, sobre todo los ftalatos (que son utilizados para dar flexibilidad al plástico).
Dichas sustancias pueden ubicarse en los envases o plásticos en los que almacenamos nuestros alimentos. Esta puede disminuir la testosterona cuando entra al cuerpo, provocando que los hombres tengan una reducción en sus espermatozoides.
La gente está reconociendo que tenemos una crisis de salud reproductiva, pero dicen que se debe al retraso en la maternidad, la elección o el estilo de vida; no puede ser químico. Quiero que la gente reconozca que sí. No estoy diciendo que otros factores no estén involucrados, pero los químicos juegan un papel causal importante. Tenemos mecanismos, estudios en animales y múltiples estudios en humanos.
En la medida de lo posible, coma alimentos no procesados (un montón de zanahorias, papas que cocine usted mismo), ya que esto debería reducir la exposición al plástico. Además, cuando cocine, no use teflón ni nada recubierto y no use plástico en el microondas.
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