Y es que el alemán ya había logrado hacerse con dos campeonatos en el equipo Benetton (1994 y 1995), por otra parte en ese entonces Ferrari llevaba desde 1979 sin que uno de sus pilotos se coronara por lo que cuando Ferrari tocó a su puerta Schumacher era una garantía de éxito.
Los italianos ya llevaban varias temporadas teniendo un gran rendimiento, con un buen equipo y autos que realmente competían y ganaban carreras, incluso en 1999 la Scuderia consiguió ganar el Campeonato de Constructores, sin embargo fue un piloto de McLaren quien se llevaría el título; así que con el anuncio de la llegada de Schumacher a Ferrari se esperaba una gran temporada para el 2000.
El Káiser no decepcionaría, haciendo grandes carreras y llevándose victorias; dicho esfuerzo culminaría en el Gran Premio de Japón, en donde se coronaría como campeón absoluto del campeonato de Fórmula 1, rompiendo así la sequía de 21 años sin títulos para un piloto de Ferrari.
El resto sería historia, el alemán conquistaría otros 4 títulos más con Ferrari para consagrarse con el máximo ganador de títulos en toda la historia de la Fórmula 1 con 7 galardones, sin embargo el británico Lewis Hamilton podría igualar dicho récord de ser campeón en esta temporada, algo que luce muy probable.
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